El domingo pasado, en el Cilindro de
Avellaneda, Racing se mostró muy superior a Independiente, tanto en el
juego como en el resultado (3-0), como hacía rato no se veía en el
clásico. Tras unos días de silencio, el técnico del Rojo, Gabriel Milito, salió a responder por el bajo rendimiento de su equipo.
El entrenador se cargó toda la responsabilidad por haber jugado "el peor partido" justamente ante el clásico rival, en lo que fue un intento por atenuar las críticas a las que vienen siendo sometidos los futbolistas de su plantel.
"Fue un golpe durísimo pero hay que levantarse. No hay ningún argumento para justificar una derrota tan abultada y tan clara como la del otro día", estimó. "Hay que dar la cara y seguir trabajando, sabiendo la desilusión que generamos en nuestra gente", dijo. Y agregó: "Me hago totalmente responsable".
"La posibilidad de irme no la tuve nunca. Quedamos preocupados y dolidos por lo que fue el partido, el resultado y la superioridad del rival", dijo Milito. El ex defensor también se disculpó con la prensa por haber suspendido la atención a los periodistas después del encuentro del domingo.
En conferencia de prensa, deslizó que continuará en el cargo si los resultados no mejoran ante River, al sostener que en el deporte hay que "levantarse" y "seguir intentando". También afirmó en este sentido que no habrá mayores cambios: de estrategia ni de nombres, porque "estos futbolistas lo pueden hacer mejor, y lo hemos hecho mejor".
De todas maneras, remarcó: "El balance no es positivo. De la Copa Argentina fuimos eliminados, de la Copa Sudamericana nos eliminaron y teníamos perspectiva de estar más arriba en el torneo. Tengo que pensar en revertir este momento".
Fuente: agencias.
Diario Clarín
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