Gastón Silva, quien mantiene una disputa por su presunto fichaje con el Club Universidad,
entrenó este viernes con el Independiente, equipo al que pretende
arribar y por el cual no habría finiquitado su pase a los Pumas.
En imágenes que circulan en redes, de grupos especializados en seguir
a 'El Rojo', se ve al uruguayo trotando en la cancha del club, mientras
otros jugadores se entrenan.
Un
par de días antes, el defensa reiteró en una carta enviada a Pumas y la
FMF que no jugará con los universitarios porque su voluntad es jugar en
Club Atlético Independiente ya que "es la única oferta de transferencia
que estoy dispuesto a aceptar".
Recuerda que en caso de que no
haya arreglo regresará al Torino a cumplir el año de vínculo contractual
pendiente y "usted será responsable de los perjuicios que ha ocasionado
de mi carrera profesional y del lucro cesante causado al club italiano
al impedir mi transferencia onerosa al club Atlético Independiente.
Ruega que Pumas cese de realizar conductas tendientes a coartar su
futuro profesional”.
Además, acusó al club mexicano de una actitud
"intimidante" frente al Torino Football Club, ya que considera que la
actitud de los universitarios no tiene sustento, porque el equipo
italiano "no puede forzarme a continuar mi carrera profesional en una
determinada entidad deportiva".
El jugador charrúa asegura que las
operaciones son "tripartitas", con lo que en el presunto acuerdo se
evidencia de algo imprescindible: “los términos de mi vínculo laboral.
Una interpretación contraria significaría que los jugadores de futbol
profesional no somos personas, simplemente cosas susceptibles de ser
transferidas. En reiteradas ocasiones los tribunales de la FIFA han
expresado que el jugador de futbol es parte de la operación de
transferencia y no objeto de ella".
Según Gastón "jamás" ha
celebrado un acuerdo laboral (ni siquiera un precontrato) con la
entidad: “Usted acompaña un instrumento (al que califica de precontrato)
que está firmado por una persona que no tiene ningún poder o facultad
legal para representarme".
Enfatiza que se reserva el derecho de
iniciar las acciones legales que correspondan por los perjuicios que le
provoque semejante "irregularidad" de parte de una federación afiliada a
la FIFA y por tanto “obligada a cumplir con sus normas reglamentarias".
Silva
incluso insta a Pumas que si considera que es responsable de la firma
"los exhorto a que inicien el correspondiente reclamo ante los
tribunales judiciales de la FIFA". Lamenta que la postura que adoptó
Pumas carece de respaldo legal y, su entender, eso evidencia que se
limitan a "ensuciar mi imagen en los medios de comunicación masivos y
conminar al Torino Football Club de mi contrato a favor del Club
Atlético Independiente de Avellaneda.
ESPN
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